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Intervienen de urgencia en San Francisco para evitar que la lluvia dañe su interior

La fachada principal está cubierta por los andamios. :: P. A. / AGM

La fachada principal está cubierta por los andamios. :: P. A. / AGM

La segunda fase de las obras de emergencia para impedir el deterioro de la iglesia barroca de San Francisco, uno de los trece templos de Lorca gravemente dañados por los terremotos de mayo, comienzó ayer con un presupuesto de 214.000 euros que financia el Gobierno central.

Los trabajos forman parte de las intervenciones de urgencia para impedir que el efecto de fenómenos meteorológicos adversos como las lluvias agrave el deterioro de una veintena de monumentos y bienes inmuebles afectados por los seísmos.

El informe de intervención en San Francisco ha sido elaborado por expertos de las tres administraciones públicas que advierten de que puede producirse entrada de agua de lluvia en la zona de encuentro de la fachada principal y las naves central y laterales, en el encuentro de las naves con el tambor de la cúpula y aumentar las grietas ya existentes.

Los especialistas han propuesto siete tipos de intervenciones directas en esta iglesia, sede religiosa de la Hermandad de Labradores, Paso Azul, entre las que se encuentra una reparación de las cubiertas en las áreas más dañadas, la reconstrucción de la cubierta de la escalera principal del claustro, el sellado con mortero de las grietas de las naves altas, el transepto y el segundo claustro del convento.

El aseguramiento de las bóvedas y la ejecución de forjados, el desmontaje del suelo original para su posterior recolocación y la reparación de cornisas son otras de las acciones previstas en la iglesia.

Este templo barroco que se comenzó a construir en 1561 es el tercer monumento en importancia de la ciudad, fue declarada bien de interés cultural en 1982 y junto al convento franciscano anexo presenta daños a consecuencia de los seísmos que superan los 7,7 millones de euros.

Fuentes del Paso Azul recordaron que durante meses la iglesia ha estado sostenida con miles de puntales y los técnicos que han trabajado en las obras de emergencia han tenido que usar brocas de 6,5 metros de longitud para taladrar y sujetar las paredes a la estructura.

La falsa cúpula de la iglesia ha tenido que ser sujetada con un complejo mecano metálico y la torre tuvo que ser acorazada en los días siguientes a los seísmos para evitar su desplome sobre la calle.

A los daños estructurales hay que sumar los que han sufrido el retablo mayor, de 1694, el de la Virgen de los Dolores y el de la Vera Cruz y Sangre de Cristo aunque el patrimonio escultórico de la cofradía sí fue rescatado del templo en las horas siguientes a los seísmos y tallas de imagineros como Capuz, Planes, Salazar, Dupart o Navarro Arteaga no han sufrido daños.

Estas imágenes se encuentran en la Casa del Paso que ha sido habilitada convenientemente para acoger a los fieles que acuden a visitarlas y rezar. La iglesia de San Francisco también guarda en su interior el único órgano que queda en la ciudad. La pieza no ha sufrido daños aparentes, aunque está previsto que el organista portugués que la restauró la examine en breve para determinar si precisa algún tratamiento especial.

Fuente: La Verdad