Muletas para el patrimonio
Muletas para evitar que las cúpulas de las iglesias se vengan abajo. Muletas para sujetar techumbres y paredes. Muletas para lograr que el patrimonio se recupere de las fisuras que los terremotos le han causado. Decenas de estructuras de hierro se han convertido en el ‘alma’ de las iglesias de la ciudad, en un sustento imprescindible para que las empresas encargadas de la reconstrucción puedan trabajar con todas las garantías. Una rehabilitación que se está haciendo a trompicones en la mayor parte de los templos. A modo de piezas de Lego, las estructuras de hierro se han ido acoplando hasta crear piezas gigantescas adaptadas al espacio a rehabilitar.
No hay límite en la altura. Hasta las cúpulas centrales de las naves principales de San Francisco y Santo Domingo alcanzan estos apoyos que han transformado la fisonomía de los edificios históricos. Hombres con casco y mono han sustituido a los turistas con cámaras de fotos. Son muletas temporales. No se quedarán porque solo están como invitadas de un pueblo, el de Lorca, que quiere, cuanto antes, recuperar su historia.
Fuente: La Verdad