Visitantes ayer en el mercado medieval del castillo. :: P. ALONSO / AGM
El parque temático ‘La Fortaleza del Sol’ del castillo reabrió ayer sus puertas al público con la instalación de un mercado artesano tras los terremotos que el pasado 11 de mayo causaron graves daños en una de sus torres y en gran parte de su muralla.
El monumento, construido entre los siglos IX y XV, declarado Bien de Interés Cultural y Monumento Nacional, perdió la tercera parte de su altura y parte de su perfil a consecuencia de los seísmos, y la torre de El Espolón se partió y se desplazó de su posición original.
La restauración y reconstrucción de lo dañado costará, al menos, 2,4 millones de euros, que pagará el Ministerio de Fomento. El Ministerio de Cultura ya ha solicitado a la Concejalía de Urbanismo licencia de obras para comenzar los trabajos, según confirmó el concejal del ramo, Francisco García.
La fortaleza es además la sede principal del Consorcio Turístico ‘Lorca, Taller del Tiempo’, que recrea la convivencia cristiana, judía y musulmana en la ciudad en el siglo XIII y que se ha convertido en uno de los principales atractivos turísticos locales desde su apertura, a mediados de la década pasada.
En el mercado ubicado en su interior han participado desde anteayer medio centenar de artesanos de distintos sectores, como el textil, el juguetero, el chacinero o el de bisutería, que han estado presentes en la segunda edición de una iniciativa que en 2010 recibió la visita de más de 4.000 personas durante sus dos días de duración.
El mercado recreó la actividad comercial del interior de la fortaleza durante el medievo, y los artesanos, con puestos y atuendos propios de la época, emularon a sus antiguos habitantes en un espacio en el que se realizaron exhibiciones musicales y de cetrería en un espacio en el que se abrió también una taberna amenizada por trovadores.
El 5% de las ventas de cada uno de los puestos se destinará a la denominada ‘Mesa Solidaria’, encargada de recaudar y canalizar las ayudas de las distintas iniciativas benéficas hacia los damnificados por los seísmos.
Fuente: La Verdad