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La rehabilitación del Conservatorio de Música estará concluida en junio

Los obreros, trabajando en la zona de la escalera. :: Sonia M. Lario/AGM

Los obreros, trabajando en la zona de la escalera. :: Sonia M. Lario/AGM

«En junio estarán concluidas las obras de rehabilitación del Conservatorio de Música Narciso Yepes», aseguró ayer en declaraciones a ‘La Verdad’ el concejal de Patrimonio, Francisco García. El edil popular insistió en que los trabajos van a buen ritmo, «lo que permitirá adelantar algo los plazos con el fin de poder acometer durante los meses de verano la limpieza del edificio y la instalación del mobiliario». De esta forma, los 400 alumnos del centro podrán volver a sus clases el próximo curso y así no tener que acudir al colegio Ana Caicedo donde reciben sus enseñanzas desde poco después de los terremotos de mayo de 2011.

La rehabilitación del Conservatorio Profesional de Música Narciso Yepes se inició a finales de enero y salieron a licitación por algo más de 827.000 euros, aunque finalmente fueron adjudicadas por 545.544,12 euros, lo que supuso una baja de un 34 por ciento. El antiguo colegio de La Purísima sufrió importantes daños como consecuencia de los seísmos que afectaron, sobre todo, a los muros exteriores del torreón que aloja el segundo núcleo de escalera. También la cúpula de la escalera principal sufrió un grave deterioro que está siendo reparada en estos momentos. Los trabajos de recuperación del edificio cuentan con supervisión arqueológica y siguiendo en todo momento las indicaciones de la Dirección General de Cultura, ya que el inmueble cuenta con protección 2 en virtud de su valor arquitectónico. Atesora una serie de escudos de armas y en su edificación se encuentran integrados el torreón T-20 y los lienzos de muralla árabes C-23 y C-24, considerados Bien de Interés Cultural (BIC).

La rehabilitación del inmueble también incluirá mejoras en las murallas árabes que discurren por el interior del edificio y que han sufrido desmoronamientos puntuales tras los movimientos sísmicos.

Fuente: La Verdad de Murcia