Patrimonio por Lorca Rotating Header Image

«Aún estamos bajo los efectos de los terremotos»

El presidente del Paso Azul, José Antonio Ruiz, ante la torre de San Francisco que muestra todavía la heridas de los seísmos. :: S. M. L. / AGM

El presidente del Paso Azul, José Antonio Ruiz, ante la torre de San Francisco que muestra todavía la heridas de los seísmos. :: S. M. L. / AGM

Esta será la segunda Semana Santa desde que sucedieron los terremotos de mayo de 2011. A pesar de que van a cumplirse dos años desde aquellos dramáticos días, la situación sigue siendo «complicada» para las cofradías lorquinas. El patrimonio es una de sus mayores preocupaciones y, aunque los templos están en uso, «aún queda mucho por hacer», según el presidente de la Hermandad de Labradores, Paso Azul, José Antonio Ruiz Sánchez.

La iglesia de San Francisco resultó gravemente dañada. Entre las secuelas aún visibles están su torre campanario, San Juan de Dios y los retablos barrocos. El Plan Director parece ser la única solución. Las cofradías, según Ruiz Sánchez, esperan esas ayudas como agua de mayo.

-…Ya estamos en Semana Santa, ¿cómo se aventura?

-Complicada. Es una Semana Santa complicada, a pesar de que nos alejamos cada vez más en la distancia de aquel fatídico día de los terremotos. Han pasado casi dos años, pero aún estamos bajo los efectos y viendo las secuelas.

-Pero, ¿la afrontan con más ilusión que el año pasado?

-Sí, por supuesto. Estamos mejor preparados y tenemos mucha más ilusión que la Semana Santa del pasado año. Entonces, salimos -como se suele decir- casi con palicos y cañicas, porque los terremotos estaban muy recientes. No pudimos hacer grandes estrenos, porque todo lo que teníamos y más, se invirtió en nuestra sede religiosa, San Francisco. Aún no hemos terminado, pero afrontamos esta Semana Santa con mucha más tranquilidad.

-Hace doce meses había miedo a que tocaran los tambores en San Francisco.

-Fueron las advertencias habituales de los técnicos después de lo que habíamos vivido. La rehabilitación del templo estaba muy reciente… Este año es distinto, aunque todavía no hemos llegado a la normalidad plena.

-¿Qué queda por hacer en San Francisco?

-Mucho, muchísimo. Los retablos están sin tocar. Las tallas del retablo mayor se dañaron y se están recuperando poco a poco. La torre campanario todavía muestra los efectos de los terremotos. Y San Juan de Dios está protegida su techumbre para que el agua no llegue a su interior, pero ahí está todo por hacer.

-¿Cuál es su esperanza?

-Que lleguen las ayudas del Plan Director. Solo ellas nos permitirán rehabilitar San Juan de Dios y convertirlo en el mayor museo de bordados de la ciudad. Espero que todo esté listo para anter de terminar mi presidencia. Es mi mayor ilusión.

-Estamos a pocas horas del primer desfile de la Semana Santa.

-Sí, el de la Santísima Virgen de los Dolores. Es una procesión magnífica en la que todos los azules disfrutamos de nuestra Madre. Es un momento muy esperado por todos. Este año parece que la participación va a ser importante. Cientos de mujeres vestirán la clásica mantilla española para acompañarla y el escuadrón de la Guardia Civil escoltará su trono. Para nosotros es todo un orgullo contar con su participación. Estamos muy agradecidos y esperamos que sigan acudiendo cada año el Viernes de Dolores.

-¿Prestarán su templo a alguna cofradía?

-No. Parece que las cofradías que aún no disponían de sus sedes religiosas han encontrado una solución transitoria. Se la ofrecimos a la Archicofradía de Jesús Resucitado, pero saldrán desde un espacio habilitado en San Patricio. También nos hemos ofrecido al Paso Morado, pero lo harán desde una carpa.

-Se han vuelto más solidarios desde los terremotos.

-Siempre ha existido la solidaridad, pero quizás desde los terremotos todos nos preocupamos más por los demás. Nosotros también nos beneficiamos de esa solidaridad cuando nos dejaron el trono de la Soledad para el traslado de la Dolorosa.

Fuente: La Verdad