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El Palacio Guevara reabrirá en marzo tras las obras de reparación por seísmos

El Palacio de Guevara de Lorca, la muestra más importante del barroco civil en la Región de Murcia, reabrirá el público en marzo, cuando concluyan las obras de reparación de los daños que le causaron los terremotos de mayo de 2011, fecha desde la que el edificio permanece clausurado.

Los trabajos, financiados por el Gobierno con fondos del programa del uno por ciento cultural, se encuentran en la recta final y la concejala de Cultura, Sandra Martínez, ha anunciado hoy la reapertura del edificio con visitas guiadas en coincidencia con la celebración de la Semana Santa.

Martínez ha señalado que el palacio se mostrará vacío y sin mobiliario durante todo el año 2013, con el objetivo de que el público visitante pueda observar no solo el resultado de los trabajos de recuperación, sino apreciar el valor de la propia edificación mostrándola desnuda de contenido.

Durante este año el consistorio trabajará en el proyecto de musealización del palacio, con el objetivo de que todo su mobiliario original vuelva a ser exhibido en el interior de sus dependencias en el año 2014, después de que muchas de sus piezas, también afectadas por los seísmos, hayan sido restauradas en distintos puntos de España.

Ese proyecto expositivo es más ambicioso, ya que el consistorio aspira a convertir el Palacio de Guevara en un centro de interpretación del barroco, por lo que al inventario de piezas y efectos de la propia casa nobiliaria que se conservan se añadirán obras de arte de otras colecciones municipales.

Las obras de consolidación del palacio de Guevara se han centrado en los últimos meses en reparar los daños causados por los terremotos, pero también han servido a los técnicos para sacar a la luz la distribución original del edificio barroco, sometida a numerosas modificaciones desde el siglo XVII.
También han desvelado cómo el edificio resistió otro importante seísmo en 1674.

La concejala de Cultura ha supervisado los trabajos acompañada por el equipo de técnicos que las coordinan y que dirige el arquitecto Gonzalo Fernández-Ilundáin, que ha explicado que se han consolidado la estructura del palacio, el patio porticado interior, se han picado y sellado de grietas y se han retirado los elementos no originales como los suelos de tarima o los falsos techos.

Fernández-Ilundáin ha explicado que estas obras «están permitiendo desnudar el palacio y estudiarlo en su integridad, algo que no se había podido realizar hasta ahora», por lo que ha destacado la importancia de que en sus primeras visitas el edificio pueda mostrarse «como un lienzo en blanco».

Puertas cegadas, ventanas que estaban y luego desaparecieron, arcos tapiados que daban acceso a las bodegas y divisiones interiores de las estancias que no respondían al planteamiento original del inmueble habían convertido el plano interior del palacio en algo muy distinto a lo que concibieron sus creadores.

Los restauradores solo han hecho un guiño a ese pasado prescindible del edificio conservando los «grafitis» que hicieron en una de sus paredes los niños que vivieron en el palacio hace 200 años, ha dicho Fernández-Ilundáin.

Los trabajos que financia el Ministerio de Fomento fueron adjudicados por 587.000 euros a una unión temporal de empresas compuesta por Ferrovial y la mercantil local Hilario Campoy.

Estas obras también devolverán al palacio a su distribución original, eliminando las divisiones de estancias que realizó su última moradora, Concepción Sandoval, baronesa de Petres y Mayais, para adaptarlo a su uso doméstico antes de ceder el edificio al ayuntamiento.

Fuente: La Verdad