Andamiaje en la fachada de la iglesia del Carmen. Foto: P.A./ AGM
La horfandad en que se encontraba la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Carmen tras los importantes daños sufridos en el templo como consecuencia de los terremotos del año pasado, al no encontrar, como en otros edificios de interés cultural, patrocinador alguno para llevar a cabo las necesarias obras de emergencia, ha terminado. El Ministerio de Cultura se hace cargo de dichas obras.
Esta decisión de Cultura se justifica por el agravamiento de la situación de la iglesia, en la que, inicialmente, solo se habían hecho algunos apuntalamientos de urgencia en el interior, pero que obligó, meses después, a colocar un gran andamiaje de hierro para sujetar la fachada, ante el peligro de desplome de la misma.
La inversión que el Ministerio destina a la iglesia del Carmen, en estas obras de emergencia, es de 600.000 euros. El arquitecto que se encarga de dirigir los trabajos es Juan de Dios de la Hoz, técnico a cuyo cargo están también las obras de recuperación de las iglesias de San Mateo y San Patricio y la reconstrucción de Santiago.
El Carmen fue el último templo barroco que se construyó en Lorca. Es de planta de cruz latina con tres naves y crucero con cúpula. Las obras se desarrollaron a lo largo de la seguda mitad del siglo XVIII. En la iglesia destaca su fachada, concebida como una gran pantalla, con tres cuerpos en altura y tres calles que reflejan al exterior la compartimentación del templo.
Su monumentalidad es solo comparable a la fachada de la colegiata y debió influir en ello el alto patrocinio que consiguieron los carmelitas y que el templo iba a estar dedicado a San Indalecio, primer obispo de Lorca, cuya imagen ocupa la única hornacina de la fachada. Junto al templo se inició la construcción de un convento que nunca se terminó.
Fuente: La Verdad